Tendencias
Y es que en tema de servicios, el centro de datos no solo es una infraestructura en una sala con condiciones apropiadas de refrigeración, energía, servidores y otros componentes, sino se convierte en una plataforma que satisface nuevas necesidades como la nube, que ha generado un catálogo de servicios que van mucho más allá de la Infraestructura como Servicio, llevando a lo se denomina XaaS (X como servicio). En este rango, podemos ubicar IaaS, PaaS (Plataforma como Servicio), SaaS (Software como Servicio) e incluso servicios como DaaS (escritorio como servicio), BDaaS (Base de Datos como servicio) y DRaaS (Recuperación de Desastres como Servicio), entre otros.
Pero, si el tema es tener soluciones más flexibles y con tiempos controlados, ha surgido una nueva tendencia y son los centros de datos modulares, diseñados para un despliegue rápido, con uso eficiente de la energía y con alta densidad de procesamiento. Se basan en el uso de componentes y módulos diseñados para entornos de misión crítica y, contemplan, los mínimos módulos como: Enfriamiento, Potencia y Espacio para TI. Con esto se logra tener un Centros de Datos operativo a un menor costo que los métodos tradicionales de construcción. De esta forma, se conocen en el mercado centros de datos tipo Container, Auto contenido, Prefabricado, Móvil, etc. Algunos están preparados para interiores, otros para exteriores, necesitan base de concreto o pueden ir sobre el piso, tienen dimensiones estándares, lo cual facilita su transporte, etc. Pero en este nuevo entorno, es importante comprender las limitaciones y beneficios de cada uno, para hacer una elección adecuada.
Yendo más al diseño del centro de datos, lo que sí es una buena práctica es pensar en su impacto con el medio ambiente. A nivel del datacenter, significa no desperdiciar ni un solo kw-hr de energía en procesos que no añadan confiabilidad al sistema y deben cumplir con normativas como ISO14000 y ROHS. Lo anterior tiene aplicación directa en el data center cuando reemplazamos baterías que usan elementos como plomo, azufre, cadmio o elementos semiconductores que utilizan mercurio. Lo mismo aplica cuando se usan aires acondicionados con refrigerantes que contribuyen al recalentamiento global, como el Freón ó R-22. De aquí mismo se deriva el segundo principio según el cual los diseños de los data centers y su manejo deben realizarse más con base en estándares producidos por entidades como: ASHRAE, TIA, NFPA, IEEE, IEC, BICSI, que tienen años de labor en investigación y son un consenso para la industria.
Se debe hacer un balance adecuado de las normas TIA, Uptime, Bicsi, ya que aunque son normas que tienen conceptos similares, existen diferencias en el momento de la implementación y centro de datos debe estar diseñado para cumplir una misión en la empresa y no solo, un tema de tecnología sino de operación.
Administración
Alrededor del centro de datos, también nace el concepto de administración de infraestructura, la cual deber ir más allá de administrar el hardware, las redes, el software, a diseñar servicios que ayuden a la operación del negocio. Si bien, desde el punto de vista tangible los elementos físicos, desde el cableado, las UPS, los racks, servidores, son el centro de la gestión, todo conduce a velar por la estabilidad, la seguridad, la disponibilidad y, ante todo, la integridad y el acceso a la información.
La infraestructura contempla todos los procesos: desde información, control de movimientos, ampliaciones, cambios, inventario real de activos de IT hasta gestión en tiempo real de la utilización de los recursos de red.
En este contexto, tendencias como la nube y la virtualización también forman parte de los desafíos de los administradores de infraestructura, quienes deben preparar su centro de datos para usar estos modelos o decidir, si llevan una parte de su operación a otros proveedores.
De hecho, consultoras como Gartner aseguran que la virtualización de los servidores es un fenómeno que ya superó su punto de retención. Gartner expone que un 40% de los servidores ya fueron virtualizados y todo apunta a que la penetración de esta solución crecerá un 75% en el 2015, no solo porque es cada vez más accesible económicamente para los negocios, sino, también, porque se ha convertido en un activo estratégico que puede mejorar la eficiencia del negocio.
Esta evolución de la computación de nube y la virtualización también ha transformado el modo en que los responsables de TI enfrentan la tecnología. En la medida que los centros de datos se virtualizan (servidores, escritorios TI) aportando ahorro en costos y en agilidad para los clientes, la automatización basada en software y la funcionalidad (redes, seguridad, almacenamiento y respaldo) señalan el siguiente paso evolutivo para ayudar a la TI a entregar mayor valor a los negocios.
Y es que mantener la infraestructura en operación es parte crítica para cualquier líder de tecnología. Un estudio de IDC, encargado por CA Technologies, señala que aproximadamente 85% de los administradores de centros de datos dicen que los problemas con la energía, el espacio y la capacidad de enfriamiento (al igual que los problemas con los recursos y el tiempo de actividad) generaron, el retraso o la cancelación de implementaciones, redujeron la capacidad de respaldar a los clientes y ocasionaron la reasignación no planificada de los presupuestos de gastos de capital y gastos operativos, en detrimento de los objetivos estratégicos.
“Las organizaciones gastan cientos de millones de dólares cada año en la infraestructura implementada en los centros de datos e, incluso, mucho más en energía y enfriamiento, además de tener gastos en personal para soporte técnico de TI y de instalación, para garantizar que las aplicaciones actuales y nuevas tengan una alta disponibilidad”, dijo Richard Villars, vicepresidente de Centro de Datos y la Nube en IDC, y autor del estudio. “Deben garantizar que esta inversión se emplee eficiente y efectivamente y que respalde los objetivos generales del negocio de entrega de productos y servicios nuevos e innovadores".
Entre los problemas específicos mencionados por 84% de los participantes, cuya infraestructura tiene un desempeño disminuido, se incluyen la energía (27%), el espacio (27%), el enfriamiento (25%) y la falta de equilibrio entre múltiples sitios en cuanto a la capacidad.
El estudio revela los motivos más comunes por los que las cosas salen mal en el centro de datos. Estos son algunos de esos motivos:
- Centros de datos obsoletos: 57% de los participantes admitieron que sus centros de datos eran “ineficientes” o solo “moderadamente eficientes”.
- Operaciones fragmentadas del centro de datos: como el personal de TI y de la instalación controlan distintos aspectos de las operaciones del centro de datos, las organizaciones no pueden implementar procesos, políticas o métricas coherentes.
- Información contradictora del centro de datos: sin una visibilidad clara de las métricas clave de la infraestructura del centro de datos, los encargados de la toma de decisiones no pueden planificar la capacidad con precisión, detectar posibles problemas proactivamente ni optimizar la asignación de recursos, como energía, enfriamiento, conectividad de red, bastidor y espacio.
El estudio destaca el hecho de que las herramientas de administración de centros de datos son, con frecuencia, manuales y fragmentadas. Sugiere que un enfoque más unificado de la DCIM (administración de infraestructura del centro de datos) puede permitir que las organizaciones obtengan más valor de sus inversiones existentes en centros de datos y respaldar mejor la innovación de negocios basada en la TI.
Más de la mitad de los administradores de centros de datos entrevistados dijeron que tener una solución de DCIM integrada tendría valor. Entre las prioridades que los participantes mencionaron sobre la solución de DCIM, se incluyen las siguientes:
- Monitoreo en tiempo real de energía, temperatura y otras variables.
- Alertas y alarmas de energía y enfriamiento.
- Inventario y administración de activos.
- Análisis y planificación de capacidades.
De esta forma, el diseño y el mantenimiento de centros de datos no es solo una moda, en cuanto a adopción de certificaciones, buenas prácticas -como orientación a servicios y protección del medio ambiente-, sino que implica, una transformación de su papel, al convertirse en plataforma de innovación para las empresas.